domingo, 17 de agosto de 2008

“Voy a dejar hasta lo que no tengo”


Llegó el momento y Vanina partió a Beijing. Todavía le queda lo más difícil, pero allá fue con toda su confianza a cuestas y la promesa que nos hiciera horas antes de subir al avión “Voy a dejar hasta lo que no tengo”
En un encuentro mano a mano, entre valijas a medio preparar y con su pequeño Iván correteando por todos lados, Vanina Sánchez Beron recibió a Red Marcial en su casa y le contó las sensaciones que vive en la previa del momento más esperado de su vida “Estoy muy contenta porque hice un buen entrenamiento. He sentido todo el apoyo de la gente que me quiere, el doble o el triple de lo que fue en Atenas; así que vamos por algo muy bueno. Sé que va a depender de mi y un poco del arbitraje, pero estoy encaminada” No es la primera vez que se la escucha a Vanina mencionar el tema del arbitraje como si fuera un competidor más a vencer “El arbitraje quieras o no siempre tiene un favoritismo”, señaló.
Sin embargo, Vanina está confiada no sólo por el entrenamiento que ha tenido, sino porque por primera vez puede ir a una competencia de este nivel con un sparring. A su vez, lleva la planificación que elaboró junto a su entrenador personal Darío Bonfante para trabajar la parte física y utilizará los días previos a la pelea para un intercambio con algunas competidoras de Colombia y Ecuador “No son de mi categoría así que no va a haber pica”, dijo. Si bien la presencia de Ricardo Puppo como coach es un valor más que importante, fue inevitable preguntarle cómo vive la ausencia de su entrenador en esta ocasión “El es el que me está viendo todos los días, el que ve conmigo cada rival y si, hubiera sido importante que esté, pero hay que ir (a Beijing) pensando en positivo, porque el objetivo está claro y no me quiero detener a ponerme mal por otras cosas”
El objetivo es ganar, y para ello debe enfrentarse a las mejores. El abanico de opciones es colorido y ninguna va a las Olimpíadas a regalar chances. ¿Las más fuertes? Francia y Corea vinieron inmediatamente a su mente, pero Sánchez Beron confiesa que sólo espera que ninguna de ellas venga en la primera ronda. “La primer pelea es la que mas cuesta, al menos conmigo. Me tiene que servir para entrar en calor” El regreso de Vanina está programado para el día 24 de agosto, dos días después de la competencia. Arriesgando un pronóstico ¿Vuelve con un “souvenir” colgado del cuello? “¡Dios quiera! Ojalá que si”, dijo soltando la primer risa de la charla. Al final de la entrevista, el mensaje que le dejó a su ‘hinchada’ fue “Dejé todo en los entrenamientos. Me siento muy bien y demás está decir que voy a poner todo, hasta lo que no tengo. Ojalá se nos de, no solamente a mí sino para el deporte y para el país”.
Una despedida a lo grande
Vanina Sánchez Berón llegó al aeropuerto de Ezeiza y se encontró con una treintena de personas que fueron a despedirla. Amigos, familia y algunos medios que quisieron tomar las últimas declaraciones en Buenos Aires de quien podría volver al país como la primera campeona olímpica de taekwondo. El obsequio inesperado: una gigantografía con su imagen colocada en el predio, gentileza de la empresa Aeropuertos 2000, la dejó sin aliento.

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